Cuauhtémoc, Chih.- Murió Humberto Ramos Molina (El pingüino), un hombre que nació y se crio en la pobreza, pero que a base de la lucha por superarse incursiono en la pintura de brocha gorda auxiliando a su hermano Paco quien era Rotulista, para después convertirse en Maestro de Educación Física para de ahí incursionar en la radio como Locutor de la X.E.E.R, la primera estación Radiofónica en ciudad Cuauhtémoc, y luego
adquirir gran parte de las acciones de dicha empresa, dándose a la tarea de hacer el uso de los micrófonos para la denuncia de la lucha social por los derechos humanos, además de organizar maratones para recaudar fondos para obras en favor de la sociedad Cuauhtemense.
Ocupó el puesto más preciado para los Cuauhtemenses, de convertirse en el Presidente Municipal en su Patria Chica y después someterse a huelgas de hambre en favor de las causas sociales; formó parte de la creación del libro sobre la historia de su tierra llamado “De San Antonio a Cuauhtémoc, herencia de grandeza”, en unión del Lic. Fernando Suarez Estrada, Arturo Trevizo Núñez, Humberto Domínguez Méndez, Bertha Legaría Andujo y Salvador García Gardea, cuya presentación al público excedió el cupo del Teatro de Cámara en ciudad Cuauhtémoc, y cuya utilidad de la venta de los ejemplares se donó para la reconstrucción de la “Casa Amor” para niños desprotegidos. Humberto participó en un número muy grande de Patronato a divorcio de obras a la comunidad. Descanse en paz. Crédito de información a quien corresponda