Por Fernando Ballesteros
La decisión se tomó a fines del año pasado por parte del Consejo de Administración del Club Sultanes de Monterrey: Darle la estafeta de la mercadotecnia a Eugenio Maiz Domene.
El hijo de ‘Pepe’ Maiz –Presidente de la organización–, ya apoyaba en diversas áreas al equipo, pero no se había involucrado al 100 por ciento hasta que le dieron el nombramiento.
Y desde que comenzó su tarea a principios de año, los resultados han sido notables a pesar del fenómeno mediático que significan en la capital de Nuevo León los dos equipos del Futbol de Primera División: Tigres y Rayados.
“De repente eso es complicado, pero en Monterrey hay afición para todos los deportes”, dice Eugenio Maiz en entrevista para Puro Beisbol. “Ellos ya tienen todas las entradas vendidas en sus dos estadios para 35 mil y 50 mil aficionados, pero cada equipo juega dos veces al mes en su casa y los Sultanes casi a diario. Sacando cuentas al mes, nosotros llevamos más aficionados al parque que en el futbol”.
Inclusive, agrega el licenciado en administración de empresas, la compañía cervecera reporta más ganancias en las bebidas que se consumen en el Palacio Sultán que en el futbol soccer.
“Yo te lo firmo donde sea que si Sultanes de Monterrey jugara cada 15 días en casa también llenaríamos al estadio al máximo”.
No obstante, los Sultanes tienen un promedio cercano a 15 mil aficionados por juego y son por mucho los líderes en asistencia de la LMB por encima de otras plazas taquilleras como Yucatán y Tijuana.
EL REGRESO DE LA EUFORIA
Durante la temporada 2006, Monterrey había vivido una euforia similar por el beisbol con la alianza que hizo Pepe Maiz junto al prominente empresario Carlos Brémer.
Desde entonces no se habían registrado más de 22 mil aficionados en seis diferentes juegos en la temporada, como ocurre ahora con las nuevas ideas de Eugenio.
EUGENIO MAIZ DOMENE.
¿Pero cuál ha sido la verdadera clave?
“Ha sido una combinación de muchos factores”, dice Maiz. “Lógicamente hay cosas que ya se venían haciendo y existen cosas nuevas. Por ejemplo, en el tema de la publicidad, se trató de uniformar el estadio detrás de la barda con los colores azul y blanco de Sultanes, lo cual aceptaron nuestros reconocidos patrocinadores.
“También hay atractivos adicionales como el baile de la gente de la limpieza del infield en el quinto inning; se ha mejorado mucho la animación en el sonido del estadio, se cambió completamente la música de los peloteros y se actualizó por géneros más juveniles. El béisbol siempre ha sido un deporte familiar, pero puedo decirte que si antes nuestra afición era en un 80 por ciento de gente mayor, ahora es un 90 por ciento de gente joven entre los 20 y 40 años de edad”.
La afición de los Sultanes no sólo disfruta de un gran espectáculo durante el juego con su equipo y la animación general, sino que al término se queda tocando en vivo un grupo musical durante una hora.
“Tenemos el reporte de que se quedan entre mil 500 y 2 mil personas, pero además es el único estadio (en México) donde la afición se puede bajar al terreno por el autógrafo, un guante, una pelota, una fotografía con el pelotero”.
Los Sultanes no han descuidado el más mínimo detalle en su parque, ya que tiene figuras inflables para un splash y que los niños puedan bañarse mientras se desarrolla el juego de pelota. Asimismo, tienen servicio de comida para que los fanáticos no se paren de sus butacas y puedan seguir viendo el juego cómodamente sentados.
FAMILIA
Eugenio es el menor de lo cuatro hijos de Pepe Maiz. Los otros son son José, de 48 años de edad; Mauricio, de 47; y María de Lourdes, de 43.
Eugenio, de 38 años, tenía 8 cuando su padre adquirió a los Sultanes y ha vivido todo ese proceso del beisbol profesional en Monterrey.
“Mi padre tomó una extraordinaria decisión en 1990, la cual considero ha sido clave hasta la fecha para mantener una enorme afición al béisbol en Monterrey. Fue el año en que dejó la entrada gratis a los niños al estadio y toda esa fanaticada que tu vez ahora esporque durante estos 25-26 años se creó la gran afición, las nuevas generaciones que irían al parque de pelota”.
Asimismo, Maiz resalta el hecho de que Sultanes mantiene la entrada gratis a las personas de la tercera edad al presentar una tarjeta, lo cual es un premio a su afición por el equipo.
El club regio tiene todos sus palcos vendidos para la temporada y unas 3 mil butacas aseguradas entre numeradas y general, pero el grueso de la afición va directamente a la taquilla con todas las promociones que realizan dentro y fuera del Estadio de Beisbol Monterrey que fue inaugurado el 13 de julio de 1990.
“Parte de esta euforia beisbolera es que nuestra equipo también va muy bien y que la Liga Mexicana cada vez es más competitiva, de mayor nivel. La prensa nos está apoyando muchísimo y los patrocinadores están muy contentos. Creo que es el inicio de algo muy grande”.
REDES
Los Sultanes tienen cerca de 300 mil seguidores en las redes sociales y son uno de los equipos más mediáticos del País junto a los Diablos Rojos del México, Naranjeros de Hermosillo y Tomateros de Culiacán.
De hecho, fueron el primer club que tuvo su cuenta verificada en Twitter y son líderes del beisbol mexicano en dicha red social con 90 mil 500 seguidores, mientras los Naranjeros de Hermosillo son segundos con 72 mil.
En Facebook, los Sultanes tienen 199 mil seguidores y están empatados en tercer lugar con los Tomateros de Culiacán. Naranjeros es primero con 262 mil y Diablos Rojos es segundo con 210 mil.
FÉLIX PÉREZ y Zoilo Almonte.
MONTERREY ES SUPER GRANDIOSO: FÉLIX PÉREZ
Llegó al equipo desde la temporada pasada, pero este 2016 el cubano Félix Pérez ha terminado por convertirse en uno de los grandes ídolos de la afición.
Siempre jugando a tope en cada batazo y jugada, el jardinero sumaba 10 jonrones y 44 impulsadas en 51 juegos para liderar al equipo en ambos departamentos, además de ser sublíder de la LMB en remolcadas.
“Jugar en Monterrey es super grandioso y a mí me gusta mucho jugar para el público. Ellos se han entregado al equipo y a mi me han dado un gran recibimiento”.
Pérez estaba en el spring training de los Rojos de Cincinnati, cuando le dijeron que iría a Triple A y decidió regresar a la Sultana del Norte.
“La Liga Mexicana tiene muy bien nivel y aquí en Monterrey jugamos a diario ante 15 mil fanáticos por juego, de tal forma que no dudé en volver cuando me llamó la directiva”.
UN TROTAMUNDOS
Pérez, de 31 años de edad y nativo de La Isla de la Juventud, Cuba –un lugar al cual sólo se llega en barco o avión, de acuerdo al pelotero–, jugó de 2005 a 2007 en la Serie Nacional de su País antes de desertar rumbo a Cancún para luego llegar a República Dominicana.
Ha jugado en Puerto Rico, Venezuela y se dio a conocer en México en el invierno de 2013 con los Tomateros de Culiacán. Actualmente tiene ofertas de Japón, pero no quiere hablar mucho al respecto porque dice estar concentrado al 100 por ciento en los Sultanes.
“En realidad he sido un trotamundos del beisbol”, dice en medio de risas el pelotero, quien el año pasado dio 20 jonrones y produjo 70 carreras en su debut con los Sultanes.
“Fui a Culiacán cuando salí de Venezuela y me contactaron llegando a Miami. Actualmente soy agente libre en el beisbol de invierno”, añadió Pérez cuya esposa Yahima vive en Florida junto con su hija Chantall, de 4 años de edad.
1949
AÑO EN que nació el nombre de Sultanes en la LMB, aunque antes jugaron como Carta Blanca e Industriales (1939-1948).
1943
EL PRIMER campeonato que ganó Monterrey en la liga.
27 MIL
500 ESPECTADORES es el aforo del Palacio Sultán.
356 MIL
291 AFICIONADOS asistieron a los primeros 27 juegos de la temporada en casa.
