Por Phil Rogers / MLB.com
El gerente general de los Medias Blancas, Rick Hahn, ha estado entre los directivos más activos en esta temporada muerta.
Tras hacer varios de los movimientos más agresivos del invierno en la historia de la franquicia, los Patipálidos se siguen reforzando para tratar de armar un conjunto que los pueda llevar de nuevo a la postemporada. La última adición es el guardabosque dominicano Melky Cabrera, quien según una fuente ha llegado a un acuerdo de tres años y US$42 millones con Chicago.
Cabrera no es una pequeña pieza. Su OPS de .808 lo colocó de trecero entre los jardineros izquierdos de la Liga Americana, solamente detrás de Michael Brantley y el quisqueyano Nelson Cruz, y sus estadísticas defensivas lo colocan entre los tres mejores jardineros izquierdos debajo del cubano Yoenis Céspedes y Alex Gordon.
Melky será un refuerzo importante para los Medias Blancas, quienes no han tenido un buen jugador en la pradera izquierda desde Carlos Quentin, quien tuvo una excelente temporada en el 2008 para impulsarlos a su último viaje a los playoffs. Desde enviar a Quentin al bosque derecho en el 2010, han contado con Juan Pierre, el dominicano Alejandro de Aza y el cubano Dayán Viciedo como sus jardineros izquierdos.
Por varias semanas se especulaba que los Medias Blancas estaban entre los interesados en Cabrera. Al final el dueño de los Patipálidos, Jerry Reinsdorf, y Hahn lograron pactar con Cabrera, algo que no debería ser sorpresa tras los movimientos que han hecho esta temporada muerta.
Chicago adquirió a Jeff Samardzija por medio de un canje — a pesar de que se puede convertir en agente libre después del 2015 — y agregó a David Robertson, Adam LaRoche y Zach Duke por medio de la agencia libre. Eso es un total de US$128 millones en contrataciones, más los posibles US$9.5 millones de Samardzija por medio del arbitraje salarial (si Chicago no logra acordar una extensión con el abridor).
Como resultado, su nómina se perfila a aumentar de los US$90 millones del Día Inaugural pasado a US$115 millones la próxima temporada. La reconstucción del equipo tiene a los seguidores del equipo llenos de entusiasmo y parece darle fin a un descenso en asistencia en el U.S. Cellular Field.
Pero Cabrera llega con la nube negra de la suspensión de 50 juegos en el 2012 por arrojar positivo por testosterona, una sustancia para mejorar el rendimiento, que le costó su puesto en el equipo de los Gigantes que salió campeón en aquel año. Después fue vinculado con el caso de la clínica Biogénesis, aunque no recibió otro castigo.
Un mejor bateador zurdo que del lado derecho, Cabrera es famoso por ser un out difícil. Solamente se ponchó 24 veces más que hace un año y se perfila a batear entre Eaton y el cubano José Abreu para el piloto Robin Ventura. Como la adición del bateador zurdo LaRoche, quien sería el cuarto bate, hará de Abreu un bateador más peligroso de lo que fue en su temporada como Novato del Año en la Liga Americana.
Será interesante escuchar lo que Hahn dice de su equipo ahora. Muchos dirían que ya el trabajo del directivo, pero nunca se sabe.
