
Marco Burgos / Agencia Reforma
A partir de hoy, los ojos del mundo voltean a Guadalajara.
Esta noche comienza la cuarta edición del Clásico Mundial de Beisbol, con la actividad del Grupo D, que tiene como sede la casa de los Charros de Jalisco.
Por segunda ocasión, México es anfitrión de la Primera Ronda y el mánager tricolor, Édgar González, espera que la afición de Zapopan juegue un rol importante.
“Es el décimo jugador que vamos a tener en el campo, en lugar de nueve. La afición debe ser uno más, se tienen que meter y entregar de lleno”, aseguró el timonel.
México necesitará de todo el apoyo posible para sobrevivir en el “Grupo de la Muerte”. Esta noche comienza su aventura ante el aparente rival más débil, Italia. El sábado enfrenta al subcampeón Puerto Rico, plagado de talento joven, y cierra con Venezuela, que llega con una ofensiva cargada de poder.
Sólo dos avanzan a la siguiente instancia, y el Tri de beisbol viene de quedarse en la primera fase en la edición de 2013, parte de ello por una derrota ante los europeos.
“Cuando empecemos a escuchar los gritos de ¡México, México! nos va a dar el impulso necesario para superar cualquier traba, eso nos va a sacar adelante”, agregó González.
Los boricuas se tomaron de manera personal que el grupo se disputara en Jalisco.
“Es un golpe bajo. Puerto Rico se lo ha ganado, y no el equipo, la fanaticada se ha ganado que lleven por lo menos una ronda a Puerto Rico”, aseguró el piloto Edwin Rodríguez.
Los de “La Isla del Encanto” anhelaban jugar ante su gente, especialmente con la nueva generación de superestrellas que crecieron idolatrando a ese equipo de 2006, cuando se jugó el Clásico en el Hiram Bithorn, de San Juan.
“Nos motiva el habernos quitado esa primera ronda. Unos jugadores jóvenes que estaban soñando jugar en un mismo equipo ante la fanaticada puertorriqueña. A donde nos envíen vamos a jugar con la misma pasión. Ir a allá (Zapopan) y ganar donde tengamos que ganar”, enfatizó Rodríguez.
Zapopan recibirá una constelación de estrellas valoradas en más de un millón 200 mil dólares en contratos.



